
Bienvenidos al Taller de Meditación(*)... ¿qué les quiero decir con esto?... que no es lo
mismo participar en un laboratorio, en un grupo terapéutico, en un grupo de encuentro,
hacer un seminario o un curso formativo. Son diferentes modos de trabajo en grupo, con
diferentes objetivos. Si bien para un terapeuta gestáltico es siempre un compartir, no es
igual un grupo que otro.
Ustedes vieron lo que son los talleres: de carpintería, cerámica, pintura. Nos
aproximamos con una actitud de exploración, de investigación... Hay un guía... hay un
maestro... hay alguien que ya pasó por los obstáculos con los que te vas a encontrar,
que, a su vez, tiene un guía y un maestro que le está enseñando cómo pasar sus propios
obstáculos.
Un taller es un espacio muy hermoso... es un espacio donde se entiende básicamente
que la exploración es esencial para la experimentación y el desarrollo... y esto es lo que
se comparte... esto es el crecimiento.
Por eso es un ámbito abierto que puede extenderse para toda la vida.
Entonces... hay que estar siempre con una actitud de principiante, muy de "¿A ver cómo
será esto?", con paciencia y humildad. Lo que estoy proponiendo es que en este taller de
meditación la actitud sea: "¿A ver cómo será esto para mí?" Una actitud de aventura y
exploración para que el buscador que hay dentro nuestro se vaya animando, pierda
timidez y gane coraje...
Lo que yo quiero compartir, entusiasmarlos y contagiarlos es de una actitud de
búsqueda personal, de experimentación. ¿Cómo es esto? Y tu respuesta, hasta donde
sea, está bien hoy.
Nadie te puede juzgar, no podés compararte con nadie, no hay una manera buena, no
hay un logro, allí es donde hay que ir... escuchándote... confiando... aceptando... así te
vas conociendo.
Sos experimentando y explorando, experimentando y explorando... en cada aquí y ahora
tu presencia se va realizando... Y esto es muy, muy difícil hacerlo solo...
Te diría que en este tipo de vida que tenemos, casi imposible. Sentarnos una hora y estar
con nosotros mismos nos puede parecer desde una pérdida de tiempo hasta un tormento;
así de lejos estamos de nuestra conciencia de ser cada uno el que es. Por eso, para ir
abriéndonos a experimentarnos es fundamental la presencia de los otros. Y es muy, muy
hermoso el darnos cuenta que nuestra presencia también resulta fundamental para los
otros, no desde la obligación de dar nada sino solamente por estar trabajando, a eso yo
lo llamo Acupuntura Social…. nuestra presencia es fundamental para el otro y su
presencia es fundamental para mí ... presencia en el sentido de estar presente ... y esto lo
haremos a través de algunas de las innumerables meditaciones que OSHO nos dejó.
Para animarme a hacer este grupo con este planteo, fueron muchas las cosas que me
aportaron, que me empujaron a abrir este espacio con esta actitud... y como todo tiene
su historia, recuerdo cuando leímos "Psicología de lo Esotérico" con Nana en Chiloé,
cuando en Anchimalén todavía no había agua ni luz. Lo leíamos a la noche, a la luz de
una vela o de un velador de kerosene.
Algunas cosas eran tan Gestalt, tan familiares, y otras solo empezaron a hacerse más
claras al ir meditando cotidianamente. En ese momento había muy poco traducido;
teníamos fotocopias de ediciones mexicanas. De todas maneras, el leerlo juntas en ese
ambiente, meditando todos los días... "algo" distinto empezó a pasarnos con Osho, su
palabra y su silencio. En esas charlas hablaba de los diferentes cuerpos... el "tema" no
era nuevo, yo ya había leído mucho acerca de esto, sin experimentar, sin "saber" ...
Mis polaridades estaban en estudiar y leer mucho, informarme y, por otro lado, lo que
no vivía quedaba como una nube suelta, gracias a Dios y al cielo no me lo creía, no
tomaba cuerpo en mí... podía darme el lujo de leer muchos libros esotéricos,
manteniéndome inocente ... sin copiar formulas ni repetir.... con una actitud de
reverencia, asombro e ingenuidad, como diciendo: "¡Qué cosa! ¿Qué será esto? ¿Dirán
esto que yo entiendo?”... Una actitud de Duda Santa.
Bueno, por ejemplo, cuando leíamos ese libro nos encantaba como traducía al lenguaje
occidental esos temas, me encantaba pero no "entendía", no tenía experiencia personal
para entender lo que él estaba diciendo, no "sabía" lo que él estaba diciendo... no es que
ahora sé... la diferencia es que ahora puedo aceptar mi no saber y al aceptar esto,
paradójicamente un "saber" que me contiene va ganando cuerpo en mí y así voy
creciendo.
En estos años utilizábamos las meditaciones en los grupos formativos y terapéuticos
como herramientas para lo que están hechas, favorecer el aquí y ahora. Todo esto fue
ocurriendo, no sé... más de trece años atrás.
Empecé a experimentar de otra manera estas herramientas. Hacer realmente
meditaciones diarias, explorándolas, investigándolas en mí, y despacio, despacio... fui
pasando de la vivencia de la experiencia, a la vivencia del desarrollo de la experiencia.
Y no sé si esto fue lo que me llevó a estar más en relación de intimidad con el Maestro,
o esta relación favoreció este contacto más próximo a mí misma... no sé qué fue
primero... lo que sé es que esto tejió el hilo que me llevó a tomar sannyas (pedir la
iniciación), después de años de conocer el trabajo de Osho... en un momento
determinado me abrí a su Presencia... y esto me hizo estar más cerca de mí.
A partir de ahí viene otro momento de mi contacto con las meditaciones que,
cualitativamente, es muy diferente. Otra cosa... un salto cuántico en mi apertura
interna... ese súbito momento de entrega marca un antes y un después... cambia la
calidad y la cualidad del espacio de la meditación... y al sentir que era una gotita de una
gran ola, mis ganas de explorar e investigar esta herramienta se profundizaron.
Muchos de ustedes me acompañaron en la exploración de algunas de estas innumerables
meditaciones... yo también los fui acompañando a ustedes, como gotitas de esta misma
ola, al hacer estas búsquedas y sentir la invitación particular que cada meditación
propone, y en muchos momentos de estas exploraciones el sentimiento del Nosotros, de
la participación conjunta en la Vida apareció como un regalo... a los que nos ocurrió
sabemos que todo esto está escrito en las páginas de nuestro corazón... este regalo
resulta también como una recompensa inesperada a nuestro esfuerzo. Pero nunca se me
ocurrió liderar un taller de meditación.
Los últimos años estuve coordinando la experiencia de hacer 21 días de Dinámica,
luego se unieron a esto Kishori, Adeesh, Yalil, Rashila, que profundamente fueron
"entendiendo" la actitud de acompañar a otros a ir al encuentro de" su meditación", es
un privilegio y un regalo que ayuda a potenciar la meditación del que está en la
coordinación en ese momento; siempre lo vivimos así.
Después volví a India , donde estuve meditando muchas horas diarias hasta encontrarle
la vuelta a estar en estado meditativo. Me sentía muy bien conmigo misma, serena y con
belleza, me encantaba estar allí y me encantaba volver, no sentía que se interrumpía
nada.
Me acordaba mucho de Campbell, cuando le preguntaban para qué sirven los mitos y él
decía:" Los mitos sirven para darle una comprensión a la gente de muchas cosas."
¿Todos necesitan mitos? -le preguntaba el periodista, él decía:"¡No! Cuando la gente
está bien no necesita nada."
Bueno, yo estaba así, no necesitaba "ningún mito", la realidad y cada momento eran
satisfactorios, estaba bien... viviendo todo como un comienzo, cada instante milagroso y
novedoso...
En este estado estaba en el avión de regreso a Argentina, y en la pantalla de TV
empiezan a pasar el noticiero de la BBC, mostrando el estado de descalabro del mundo:
violencia, locura, miseria en cada partícula de las imágenes... Y estaba viendo esto con
el corazón abarcándome entera y lloré... lloré mucho de compasión por todos nosotros.
Y puedo permitirme decir esto ahora sin ocultarlo, porque sé que todos entendemos lo
que estoy diciendo... me lo muestra unión que siento entre nosotros... esta respiración
silenciosa... este momento de comunión.
Hay dentro de cada uno un aspecto que no deja de llorar, no se resigna a que no sea
posible el Sueño de Comunión entre los Hombres... y esta no es una pena negra... es una
pena blanca, jamás deberíamos querer superarla... deberíamos entenderla y encontrar
nuestra creatividad para la realización de este anhelo... Y ese aspecto se siente
reconocido en este momento, eso es lo que muestra este silencio... y este brillo en la
mirada... Y así yo iba entendiendo todo en ese avión...
"¿Qué puedo hacer?" me preguntaba. Mi tarea como terapeuta resulta tan acotada y
absurda vista desde esta dimensión... Recuerdo en este momento una frase que solíamos
repetirnos como un secreto compartido con mi amada amiga y colega Kita, en
momentos de desolación: "... estamos recogiendo agua con cucharita en medio del
maremoto." Siento que lo único que puedo hacer desde este lugar es transmitir y
compartir algo que a mí me abre hacia la claridad de entender con más inteligencia la
locura general en la que todos estamos metidos, para recuperar el profundo
entendimiento de que hay un punto de inflexión donde también somos cada uno de
nosotros responsables por nuestra gracia o nuestra desgracia. Para rescatar un poco de
belleza a la fealdad, un poco de bondad...
Recordé en ese momento lo que siempre dice el Maestro: "a este mundo le falta
meditación", y me dije: "Bueno, además de la tarea del consultorio, quiero abrir talleres
de meditación". Esa es una de las motivaciones personales básicas.
Otra de las motivaciones tiene que ver con un sentimiento de responsabilidad. Hace
unos años estoy colaborando diariamente en la difusión de estas herramientas y creo que
llegó el momento de profundizar no sólo en las herramientas sino en una “actitud"
acerca de ellas. Son muy potentes, muchos coordinadores las usan en sus grupos, sin
decir que son meditaciones, sin el contexto de trabajo interno. Es bastante normal,
natural, se podría decir, en este ambiente tan intelectualizado. Decir que son las
meditaciones de alguien que para el común de la gente es un Gurú... me imagino que
puede producir un poco de inquietud, me imagino que se podrían sentir descalificados.
De todas maneras, estoy convencidísima que esto va ir cambiando... estoy segurísima...
tanta gente inteligente atraída por el trabajo de Osho va ir produciendo mucha
curiosidad... y sabido es que los terapeutas lo que más tenemos es curiosidad... si no,
cómo meternos con los otros... De todas maneras, no tenemos por ahora en occidente
una categoría para nombrar rápidamente la inmensidad del Maestro.
Las personas que dirigen grupos tienen que mantener su rol sostenido mucho por la
mirada de los otros, entendiendo que no son miradas que ven realidades sino que están
teñidas de prejuicios y de ignorancia.
Es muy conocido el chiste de que es difícil reconocer al terapeuta en la playa... "¿Cómo,
usted también toma sol?"... con todo lo que eso implica.
Por otro lado se ha confundido la mística con la magia, y a ésta con la manipulación de
los otros. Decir que Osho es un Maestro Místico Iluminado, no significa nada para
aquel que no se ha abierto alguna vez a alguna Enseñanza, por lo tanto, es más fácil
decir que es un Gurú, aunque tampoco se sepa qué quiere decir esto... En esta vaguedad
la cosa quedaría algo así como "alguien religioso —por lo tanto, mágico, irracional, a-
científico". El automatismo de la mente y sus condicionamientos, nos enviaría un
posible mensaje que diría: "Bueno; no sé de qué se trata lo que propone este hombre...
en tal caso no tiene nada que ver con nosotros."
De todos modos cuando la danza de prejuicios jaquea al rey, la reina a veces languidece
y a veces no, da una somera mirada al mundo que la rodea, confirma su estupidez, se
anima, busca torres y caballos... y sigue.
Es muy importante que entendamos que estas meditaciones son herramientas
especialmente hechas para ayudarnos a ir al encuentro con nuestra alma, no es bueno
desnaturalizarlas y sacarlas de ese contexto. Tienen una dirección extraordinaria y
sutil... un profundo sentido. Descontextualizarlas dificulta aún más la dura tarea que es
encontrarla.
Estas meditaciones son un "truco bendito" para activar la capacidad de curación que hay
en cada uno... y éste es un trabajo del Espíritu, por eso son herramientas espirituales, es
un paciente y esforzado trabajo en el que nos involucramos sin garantías ni recetas.
Stanislaf Groff explica siempre, de modos sencillos y contundentes, los efectos que
pueden producirse por la descontextualización del uso de drogas alucinógenas. Dice por
ejemplo que si echamos unas gotas de LSD en una jarra de agua y servimos un vaso de
ésta a los asistentes a una fiesta, la gente, al no saber lo que está tomando, cuando
empieza a sentir los efectos, éstos no solo no contribuirán a ampliar el umbral de
percepción, objetivo de la droga, sino que lo achicarán, porque la gente no comprenderá
lo que está ocurriendo, sabido es que el miedo disminuye y oscurece la noción de
realidad.
Estas meditaciones pueden ser tan potentes como una droga.
Entonces es muy bueno abrir un espacio de taller, donde a todos los que estamos
interesados en explorar, investigar y desarrollarnos, partamos de la propia experiencia.
Me encantaría que nos podamos contagiar, y que se puedan hacer estos talleres de
exploración en muchos lugares, es muy sencillo poder hacerlos. Lo más difícil es lograr,
por otra parte, de los coordinadores, una actitud de renuncia y mucha, mucha paciencia.
¡Como verán no es tan sencillo!... ¡Y es verdaderamente hermoso!
Encontré un libro**, prologado por dos terapeutas que coordinaron un taller de las
meditaciones que están aquí. Estos terapeutas tienen una relación de no menos de veinte
años con el Maestro. Este trabajo fue hecho durante tres meses en el campo meditativo
que existe en Poona, India, durante todos los días, de 9 de la mañana a 4 de la tarde.
De las 112 meditaciones que forman parte de las incluidas aquí, recién pudieron
explorar 50... son las personas que más han estado de modo grupal, sistemáticamente
trabajando sobre esto.
Les quiero decir que tenemos que empezar este trabajo con una humildad total, sin
ninguna pretensión, con todo el tiempo del mundo, buscando distintos modos de
reunión, ya sea haciendo campos de meditación de dos o tres días, encontrándonos por
tiempos prolongados... Nosotros estamos disponibles para no estar atados a ningún
modo en especial, entendemos de partida la dificultad que implica la propuesta en este
ambiente, donde la gente que está "buscando" se siente invadida por una multitud de
actividades: hacer, hacer, hacer... Este taller tiene una alta pretensión: habitar en el
terreno del Ser y no del hacer, por lo tanto, estamos muy conscientes de la dificultad que
esto implica.
Estas técnicas son las herramientas de la Psicología de los Budas, no es una psicología
para que las personas puedan funcionar mejor en el sistema, puedan arreglarse con su
pareja, cosa que es muy buena, o puedan tener un poco de tranquilidad, sino que tiende
a que las personas puedan estar reconciliadas consigo mismas... En silencio y alegría
interior y, desde ahí, despacio... despacio... aceptar lo inconmensurable, formar parte del
plan infinito.
La genialidad de Osho es adaptar todo lo que pasó en otros tiempos a este mundo
nuestro de todos los días que no tiene nada que ver con el mundo que podría haber sido
hace 50 años. ¡Estas técnicas están dando vueltas por la civilización hace 2000 o 3000
años!
Ese es el regalo que nos ha dejado. ¡Ubíquense en el regalo!
Él estaba parado en un lugar donde podía ver mucho más. Podía ver de dónde veníamos
y a dónde íbamos. Es como alguien que se para arriba de un árbol y otros están abajo. Y
el que está arriba del árbol dice: “Ahí viene un coche y allá se va alguien". Pero el que
está abajo no lo ve. Para el que está abajo el coche es el futuro, todavía no lo vio, lo va a
ver cuando pase cerca, para el que está arriba es el presente. O sea... una persona que
estaba subida a una conciencia tan alta que podía tener otra comprensión del tiempo.
Mucha gente tiene esta visión más total y se retira del mundo. Un pequeño "darse
cuenta" que logramos en un grupo, en un laboratorio, resulta transformador... y no
queremos volver al mundo de todos los días, la fantasía es que se nos va a escapar...
Con esto podemos levemente imaginarnos lo que puede ser tener este contacto directo
con la Realidad que pueden tener los Maestros.
Osho, viendo todo eso, no se retiró y siguió trabajando con infinita dedicación y
paciencia. Es muy fuerte, yo estoy profundamente agradecida... por siempre.
Cada vez que nos encontremos, vamos a hacer algunas meditaciones, vamos a comer
juntos, vamos a estar en silencio. A lo que los invito es a tener este espacio como de
puesta entre paréntesis con el afuera. Es muy lindo estar descansando y en silencio con
otros, compartiendo las preguntas y las respuestas... La idea es que vayamos haciendo
crecer desde la conciencia ese espacio de "yo soy yo, estoy aquí, este es mi cuerpo, este
es mi tiempo" como vivencia.
Él siempre dice: empezar por el cuerpo, empezar con el cuerpo. Para la gente que no
está enraizada en el cuerpo puede ser contraproducente implementar estas herramientas
porque alguien que no se siente en un lugar... verse a sí mismo sin sentirse en un lugar,
puede producir bastante distorsión, ¿no? Las meditaciones son para desarrollar el testigo
personal, no identificarse con el barullo, con las partes, sino ir desarrollando una
comprensión de más totalidad dentro de uno, ir viéndose desde un ser total.
Entonces yo quisiera que empecemos este grupo de hoy con Dinámica y a la tarde
Kundalini, estas dos son las meditaciones pilares, es muy bueno hacer 21 días seguidos
de Dinámica y, en otro momento, 30 días seguidos de Kundalini. Esta es una manera
muy hermosa de captar cómo trabaja la meditación en cada uno... De este taller irán
saliendo estos grupos para aquellos que les interese ir sintiendo este desarrollo... Por eso
es tan importante un grupo de compañeros que estén en esta aventura...
Bueno ... empecemos esta mañana con Meditación Dinámica. Las etapas de esta
meditación son cinco...
Bajo Belgrano, Marzo de 1993
* Después del sexto taller de meditación el grupo decidió bautizarlo con el nombre Sopa
de Pato, en alusión a un cuento sufi que hace referencia a esta sopa como la sopa
original, no la sopa de la sopa de la sopa del pato que en realidad es agua caliente y se
crea la ilusión de que se está tomando sopa o sea algún alimento.
(*) Referencia a dos tomos de más de 3000 páginas donde Osho describe más de 112
meditaciones tántricas y realiza sus comentarios sobre los sutras de Shiva a Shakti.
Estos libros se llaman "Vighyan Bhairav Tantra".